La aragonesa Cristina Navarro, antigua campeona de España de boxeo olímpico, vivió la semana pasada una experiencia que ella considera inolvidable, aunque estamos seguros de que volverá a conseguir una oportunidad similar. La púgil española, entrenada ahora por Pablo Iniesta en Zaragoza, combatió por el Título WBA del peso minimosca en Toronto, ante la local Sara Bailey.
A pesar de la derrota, Cristina Navarro tuvo una destacada actuación y, a su regreso, ha querido compartir con nosotros su punto de vista sobre el combate y sobre toda la semana en el país norteamericano. Como en los días previos a la cita, la zaragozana lo primero que hace es dar las gracias por las noticias que se han ido publicando sobre ella, lo que ha ayudado a que mucha gente le hiciera llegar mensajes de ánimo.
Después de “un montón de horas de viaje” entre Zaragoza y Toronto, nuestra deportista había logrado recuperar horas de sueño y se mostraba todavía entusiasmada por todo lo vivido: “Las sensaciones del combate fueron maravillosas. Como hablaba con el equipo, es el combate del que más he disfrutado en toda mi carrera, tanto de amateur como de profesional. Siempre suele haber en los combates un momento en el que no estás a gusto, en el que no te encuentras, pero en este estuve en todo momento feliz, muy concentrada, escuchando a la esquina todo el tiempo”.
Pese a su derrota por puntos, Navarro se mostraba contenta por su actuación y sentía que el buen trabajo de las últimas semanas se había podido plasmar sobre el ring. Como nos contó el día previo Pablo Iniesta, con cuatro semanas llegaron las primeras noticias de la posibilidad del combate y vieron que podían llegar en buena forma. Lo mismo ratificaba, en nuestra conversación, la boxeadora: “Sobre el ring, noté que estaba combatiendo con un pedazo de boxeadora, pero también noté que estaba plasmándose todo el trabajo que habíamos estado planificando. Fue un combate activo, pero tuve la sensación de que podía mantener el ritmo los diez asaltos. En este sentido la preparación fue maravillosa”.
La boxeadora española puede dar sin problemas el peso mínimo, aunque no pudo decir no a esta oportunidad en la categoría inmediatamente superior, la del peso minimosca. Eso sí, notó que es algo que benefició a su adversaria. “Mi rehidratación fue buena, recuperé muy bien. Eso sí, noté que Sara Bailey es una categoría de peso diferente; no tanto en su golpe, pues no notaba una pegada dura, pero sí cuando yo llegaba con mis manos, pues la notaba muy resistente. Es una mujer muy fuerte”, explicaba Navarro.
La experiencia, eso sí, inolvidable para ella. Así, todavía se puede percibir la emoción en las palabras de la aragonesa: “Me siento afortunada por haber vivido una experiencia de este tipo, tan bonita, por haber podido disputar un título y representar un poquito a nuestro país. Un poco triste, por el resultado, ya que una derrota siempre te deja un sabor agridulce, pero, en general, creo que ha sido un viaje genial, una excelente experiencia, vivida junto a un equipazo (Pablo Iniesta, Sergio Pérez y Javier Pardo)”.
¿El futuro inmediato? Cristina no quiere parar: “Deseando subir al ring otra vez. A seguir mejorando, a seguir aprendiendo y a por más retos que salgan”.
Desde aquí agradecemos a Cristina Navarro su amabilidad y le deseamos lo mejor en su carrera futura.