Historia

La Real Federación Española de Boxeo, como tal, se constituye en los últimos de agosto de 1922, cuando diferentes clubes se unen para intentar dotar al boxeo de una cierta estructura que permita un avance significativo del mismo en nuestro país. En su primera Junta Directiva estarán representados algunos de los grandes nombres de la época como Lorenzo Ramonet (Presidente), José Clols (Vicepresidente) y el genial Ramón Larruy (boxeador, entrenador, periodista…) como Secretario.

Con Barcelona como centro neurálgico y Madrid como segunda ciudad en importancia pugilística, el Boxeo seguirá con su expansión. El primer campeonato de España de la FEB se disputaría el 1 de diciembre de ese año, en el Iris Park barcelonés, entre Joe Valls y Pedro Sáez, con victoria de Valls. A Madrid el primero llegaría en mayo de 1923, capítulo inicial de una trilogía entre Martín Ferrand y Manuel González por la corona mosca y que se disputaría en el Circo Americano.

Campeones Historicos

Una vez reglamentada adecuadamente la Federación y quedando incluida en el organismo europeo de la época, la International Boxing Union (IBU), el desarrollo del Boxeo puede tildarse de espectacular. Esta primera gran etapa puede quedar englobada por dos grandes acontecimientos:

– 30 de octubre de 1925. Primer campeón Europeo: Antonio Ruiz (Teatro Circo Price)
– 1 de junio de 1935. Primer campeón mundial: Baltasar Sangchili (Plaza de Toros de Valencia)

Entre medias podrían citarse numerosísimas fechas señeras y grandes boxeadores que se hacían un hueco a nivel nacional y europeo antes de emprender las Américas en busca de gloria y dinero.

Algunos de los hitos deportivos fueron:

– Diciembre 1925: Primer campeonato de Europa entre españoles (Antonio Ruiz vs Young Ciclone)
– Segunda mitad de 1927: Víctor Ferrand, Luis Rayo y Paulino Uzcudun campeones europeos al unísono
– 1929-1933: 8 victorias de Josep Gironés por el Europeo pluma
– Noviembre 1930: Uzcudun y Primo Carnera y el récord de asistencia al boxeo en Montjuïc
– Marzo 1931: Primer mundial en España, Frankie Genaro vs Víctor Ferrand (NBA)
– Octubre 1934: Uzcudun vs Max Schmeling II
– Febrero 1935: Mundial pluma Freddie Miller vs Josep Gironés (NBA)

Con el estallido de la Guerra Civil Española el país quedó paralizado, aunque en algunas zonas (como Barcelona) en un principio todavía se organizó alguna velada. Las décadas de los 40 y 50 fueron de reconstrucción del país y también en nuestro deporte.

En los años 40 la principal figura fue el catalán Luis Romero, campeón europeo gallo a finales de los 40 y aspirante al mundial en 1951. La década de los 50 se caracterizaría por el progresivo desarrollo, que parecía coincidir con el del país; en su segunda mitad destacarían grandes boxeadores como Fred Galiana (una figura dentro y fuera del ring) y el peso mosca madrileño Young Martin, sólido campeón europeo y que llegó a disputar el mundial, sin suerte, en Buenos Aires ante el gran Pascual Pérez.

La situación de progreso se mantendría en los 60, donde quizá sobresalió por encima de todos, por calidad y por convertirse en un verdadero fenómeno social, Luis Folledo. Mimoun Ben Ali fue otra de las grandes figuras, quien mereció mejor suerte a la hora de conseguir una oportunidad mundialista. El boxeo seguía siendo uno de los deportes de más relevancia en el país y los boxeadores podían surgir en cualquier parte. Es el caso del gran trabajo que se realizó en Canarias, que aportaría una generación de grandes púgiles encabezada por otro de los hombres claves de los últimos años de este período: Juan Albornoz “Sombrita”.

Vicente Gil, al frente de la Federación Española desde 1956, sería el encargado de sentar las bases adecuadas para que nuestro boxeo ascendiera lenta pero seguramente y se encaminara a los años de esplendor.

La eclosión definitiva serían los años que van de 1968 a 1977, división que podría quedar validada por dos acontecimientos de gran importancia:

– El primer mundial de José Legrá, el segundo para el Boxeo Español 33 años después de que Baltasar Sangchili se hubiera proclamado campeón en Valencia (24/07/1968)
– El “mundial de la montaña”, es decir, la victoria del cántabro Cecilio “Uco” Lastra ante el panameño Rafael Ortega y que le daría el mundial WBA pluma (17/12/1977)

Entre ambas fechas, una actividad impresionante y una colección de grandísimos púgiles y de campeones en el concierto europeo e incluso mundial.

Los hombres que lograron la máxima corona del boxeo fueron, además de Legrá en dos ocasiones (WBC pluma) y de Lastra:

– Pedro Carrasco (WBC Ligero)
– Perico Fernández (WBC superligero)
– Miguel Velázquez (WBC Superligero)
– José Durán (WBA Superwélter)

Junto a ellos se debería citar un largo listado de hombres que han quedado para la Historia de este deporte. Sin querer que sea un listado exhaustivo se podrían citar nombres como: Manuel Calvo, el peculiar y genial Agustín Senín, “Marianín” García, José Antonio “Gitano” Jiménez, Kid Tano, “Tony” Ortiz, “Urtain”, José Hernández. Y los inicios de Alfredo Evangelista, que en mayo de 1977 tomaría un avión que él creía que le iba a llevar a Francia… y que finalmente le llevaría a Estados Unidos, donde se presentaba su duelo contra Muhammad Ali.

Vicente Gil, en 1968, presentaba su dimisión y dejaba la dirección de la Federación a Roberto Duque, que en junio de 1973 también presentaba su adiós.

Hoy cuesta creerlo, pero en aquellos años se percibía claramente. Aunque los campeones a nivel europeo llegarían a su máxima cota en los años siguientes (últimos de la década), lo cierto es que el clima era de pesimismo, pues se creía que el papel del boxeo había comenzado a declinar. Menor número de veladas, el público que parecía no responder de la misma manera, el cambio de Régimen que había hecho nacer con fuerza una serie de enemigos que reivindicaban la prohibición de este deporte y que lo asociaban al período político anterior y una serie de accidentes mortales, eran indicadores de que todo empezaba a cambiar.

Y ello, como apuntábamos, pese a que los éxitos deportivos continuaron de manera regular hasta bien entrados los 80. Son los años en los que uno de los mayores infravalorados de nuestro deporte, Roberto Castañón, domina Europa con mano firme. Son los años de “su rival”, Carlos Hernández. De Juan Francisco Rodríguez y Enríque Rodríguez Cal, que pasaron al profesionalismo tras formar parte de aquella mítica selección de “Los Rodríguez”. Los años de la gran actividad en el Norte con Horacio Ruiz, los hermanos Sánchez, Amaña. La época de José Luis Heredia, Gómez Fouz, de Antonio Guinaldo.

A partir de 1983 el declinar anunciado se hizo altamente visible. Los años de grandeza se habían esfumado y había que concebir el Boxeo como algo diferente. Todo ello pese a que a finales de esa misma década aparecería la figura sobre la que parecía poder reconstruirse el Boxeo Español: “Poli” Díaz. El hombre al que seguían desde las estrellas de la ya agonizante “Movida Madrileña” hasta la gente de condición más humilde de Vallecas, pasando por algún ministro que no dudaba en criticar las decisiones del compañero que prohibió de manera definitiva este deporte en Televisión Española. Sin embargo el ciclón “Poli”, deportivamente hablando, acabó prácticamente en aquella noche mítica del verano del 91 en Norfolk, tras la derrota con Whitaker. Por entonces, “El Potro” no había cumplido todavía 24 años.

A pesar de que nada sería igual que en los años de esplendor, la evolución tecnológica y audiovisual iba a echar una mano al boxeo. La aparición de nuevas Emisoras de Televisión propició que se necesitaran más contenidos y el Boxeo volvió a alcanzar un escaparate. Las privadas en abierto, las autonómicas y, finalmente, el mecenazgo de Canal + (a imitación de su raíz francesa), llevaron a que los éxitos regresaran, aunque en un clima diferente al de finales de los 60. Así se produciría el ascenso de Javier Castillejo, hasta el momento el único púgil español campeón en dos categorías de peso (Superwélter WBC y Medio WBA). En 2001, “El Lince de Parla” protagonizaría otra de las peleas referencia de nuestra Historia: su duelo en Las Vegas con Óscar de la Hoya.

Los últimos años del siglo y primeros del nuevo vieron a otros campeones mundiales españoles como José Antonio López Bueno (Mosca WBO) y Jorge Mata (Mínimo WBO). También a María Jesús Rosa proclamarse como la primera campeona de nuestro país (Minimosca WIBF).

Sin embargo, terminado el primer lustro de la década inicial del siglo XXI, la inversión televisiva dejó de ser significativa, lo que junto a otra serie de factores llevó a un pequeño vacío. No obstante, hay que destacar a otros dos boxeadores que consiguieron llegar a la cima: Gabriel Campillo, en la mágica noche de Sunchales (WBA semipesado) y Kiko Martínez (Supergallo IBF)

 El clima de desolación estructural iba a comenzar a cambiar desde mediados de la segunda década del siglo XXI y con el preámbulo de la consecución del Título Mundial IBF, del peso supergallo, por parte de Kiko Martínez. Pese a la falta de apoyo televisivo, el boxeo profesional español vivirá una gran etapa con nombres como Rubén Nieto, Kerman Lejarraga, Sergio García, Sandor Martín, Isaac Real, Jon Fernández, Juli Giner… y la potenciación del boxeo femenino, que dará una campeona mundial (Joana Pastrana) y diferentes monarcas europeas (la propia Pastrana, Katy Díaz, Miriam Gutiérrez, Mary Romero, Joana Suárez, Melania Sorroche).